El día 31 de mayo se ha realizado en San Bernardo con la participación de 4000 personas una primera marcha por la vida. Era ecuménica e incluso con no creyentes, todos manifestando a las autoridades que Chile quiere una cultura de VIDA Y NO DE MUERTE. y que la religión sirve para promover vida y salud, para defender la dignidad y el valor de la persona y no los intereses de las multinacionales que promueven aborto y eutanasia.