Se pueden ver en las fotos dos señoras que refieren haber sido ayudadas en su enfermedad por Nicola D’Onofrio.
Luego un anciano profesor que en sus últimos días de vida se siente acompañado en la cabecera de la cama por varios santos y entre ellos al Venerable Nicola D’Onofrio.
La última foto actual (18 de agosto de 2015) es del ex carabinero José Luis Pezo, que en el 2003 recibió un presunto milagro por Nicola D’Onofrio recuperándose de una bala que le entró en el cráneo y hasta hoy agradecido y cercano a Nicola.
El último caso se cuenta en el Hospital Parroquial de San Bernardo. el señor Ricardo Hargraves Salas de 57 años, se hospitaliza el 5 de junio por un resfrío mal manejado transformado en asma, neumonía, arritmia de tipo flutter ventricular y está en la UCI del hospital esperando que las drogas vaso-activas hagan algún efecto. El capellán P. Pietro, camiliano, le da la Unción de los Enfermos, siendo pocas las posibilidades de sobrevivir según los médicos, y la pastoral camiliana del hospital (la Señora Magali Parada) da la estampita de Nicola D’Onofrio a todos los familiares para que recen con fe por Ricardo. La situación se estabiliza, pero queda grave. Una doctora decide de trasladar el paciente a otro hospital (clínica las Condes) para hacerle un tratamiento para la arritmia mortal que este paciente presenta. Justo en esta noche que el paciente es trasladado, en el hospital parroquial hay un corte de luz que afecta la UCI y que habría causado la muerte de Ricardo que dependía únicamente de las maquinas. Ricardo regresa al hospital y se recupera de su enfermedad y está hasta hoy (20 de agosto) en convalecencia muy agradecido a Nicola D’Onofrio al cual le tributa la salvación de su vida física, junto con toda su familia.
Otra historia sobre Nicola que llegó en estos días, relata de lo que pasó 10 años atrás en el hospital Salvador de Santiago: el paciente Ugo Robles Castro, un tecnólogo médico del mismo hospital hospitalizado por cáncer gástrico con metástasis, y por tanto, no operable, recibía cada noche la visita de un camiliano joven sonriente, con habito negro y una cruz roja, que decía llamarse Nicola y esta visita le daba mucho animo para entregarse en las manos del Señor (era ateo). Ugo se convirtió a Jesús antes de morir. Además regularizó su convivencia casándose por la iglesia católica. Una linda sanación espiritual realizada por Nicola en Santiago donde no están los religiosos camilianos.