No es raro que por teléfono llaman a la parroquia o a la comunidad camiliana chilena para pediro como agradecer a Nicola D’Onofrio por una gracia recibida o una intercesión que logró su resultado: la sanación. también las estampitas siguen buscadas por la gente en las más grandes librerías católicas de la capital (San Pablo, Centro de Schoenstatt de la Florida,…). Pero lo último que pasó fue de verdad muy interesante y novedoso.
El P. Mauro Matthei, benedictino de 86 años, leyó por primera ves la biografía de Nicola D’Onofrio en el 2011 y se quedó muy triste por el modo en que este joven tan santo murió, pero asoció esta lectura con el tema de sanación de los Camilos, carisma vinculado a la salud y con la sanación que descubrió en este mismo año gracias a la Renovación carismática.
El proceso sanación siguió en su vida y en su comunidad tanto que hoy a distancia de 6 años: él es un sacerdote muy activo a nivel de direcciones espirituales privadas y con grupos en la sanación cristiana católica, y siente que su sacerdocio es mucho más pleno que antes; su Abad ha sido nombrado exorcista en la diócesis de Santiago y trabaja mucho en este sentido liberando a tanta personas esclavas del mal (al comienzo ni quería escuchar el término “sanación”), la comunidad benedictina de Las Condes empezó a trabajar en su interior el tema sanación, reconciliación y perdón y es hoy una comunidad mucho más sana y unida que 6 años atrás, las vocaciones que por muchos años abandonaron a los benedictinos de Chile ahora son varias y uno ya ha llegado en estos 6 años a la profesión perpetua, el convento se ha vuelto vivo y llenos de personas que van pidiendo confesarse y trabajar espiritualmente.
yy todo esto empezó con Nicola D’Onofrio y su vida que entra en un convento. hoy P. Mauro Matthei conoció al P. Pietro Magliozzi m.i. y colabora con la sua actividad de sanación integral iniciada en la Pontificia Universidad CAtólica a nivel académico.